Cada año, el carnaval anima las ciudades y pueblos de Francia con sus desfiles espectaculares, sus disfraces extravagantes y su ambiente festivo. Esta tradición, que tiene origen en la Edad Media, precede a la Cuaresma y antiguamente permitía a la población celebrar antes del periodo de ayuno.
Los Carnavales más famosos
Entre los carnavales más renombrados de Francia, el de Niza destaca por su magnitud. Cada año, en febrero, la ciudad de la Costa Azul acoge a miles de visitantes que admiran sus carrozas decoradas, sus batallas de flores y sus gigantescas efigies animadas.
Los Carnavales más famosos
Entre los carnavales más renombrados de Francia, el de Niza destaca por su magnitud. Cada año, en febrero, la ciudad de la Costa Azul acoge a miles de visitantes que admiran sus carrozas decoradas, sus batallas de flores y sus gigantescas efigies animadas.
Otro carnaval emblemático es el de Dunkerque, famoso por sus “bandes”, donde miles de carnavaleros, vestidos de forma extravagante, cantan y bailan en las calles bajo una lluvia de arenques lanzados desde el ayuntamiento.
En Bretaña, el carnaval de Granville, inscrito en el patrimonio inmaterial de la UNESCO, se distingue por sus carrozas humorísticas y satíricas, que suelen burlarse de la actualidad política y social.
Una celebración para todos
El carnaval es una fiesta popular donde cada uno puede dar rienda suelta a su imaginación. Niños y adultos se disfrazan de personajes coloridos y participan en los desfiles, los bailes de máscaras y las diversas actividades organizadas por los municipios.
Más allá de su aspecto festivo, el carnaval sigue siendo un momento de compartir, creatividad y tradición, reuniendo a generaciones en torno a un evento alegre y lleno de luz. Ya sea como espectador o participante, el carnaval en Francia es una experiencia para vivir y celebrar cada año.
